viernes, 10 de julio de 2009

YESHUA – TREN

Alexiis, 9 de julio, 2009

Amados Maestros buenas noches, son las diez menos diez y no sé qué está pasando, me siento rara. No sé si tiene que ver con lo que me contó Sergio (durante una época en su vida de noche sentía como si venía un tren a toda velocidad pasando sobre él, una experiencia tremendamente traumatizante), no sé, ¿me están llamando ustedes?, por favor si es alguien de la Luz que se manifieste...

Sí Alexiis, soy Yeshua, toda la tarde los hemos estado observando porque queríamos venir pero como vimos lo que pasaba* no quisimos interrumpir.

Ahora sí me manifiesto porque a raíz de lo que ustedes estaban hablando – respira profundo, tranquilízate chiquita, no pasa nada. Evidentemente lo que Sergio vivenció, primero el contacto con los dos desencarnados y luego esas experiencias, tuviste mucha razón, él se metió, inconscientemente y sin quererlo incluso, y también su hermana con la misma experiencia del tren, en lo que podríamos llamar – no son túneles – son pasos de dimensión, vórtices, vórtices sería la palabra más adecuada.

Porque si estás en un vórtice el ruido que produce la circulación del aire, de la energía, es tremendo y – digamos – va en aumento, al principio lo sientes poco y va en aumento, aumento y aumento hasta un momento en el que casi se te hace insoportable y lógicamente con el conocimiento que en aquel entonces tenía Sergio no pudo definir bien lo que era y yo creo para que comprendan la definición esta, fíjense un poco en las canalizaciones de Ekara, en la cual habla o están reunidos en vórtices y como mismo en la canalización, Alexiis, has escuchado el ímpetu que en cierto momento viene con el viento, porque es todo un ser vivo.

Todo esto ha producido el crecimiento tuyo Sergio, han sido vivencias en las que a través de un vórtice pasaste a otra dimensión. Evidentemente tu hermana también lo ha vivido una vez como dices.

Es una cosa que ese paso de dimensión produce una energía en el cuerpo humano que no saben definirlas con palabras, no saben catalogarlas y es eso lo que te pasó a tí como también le pasó a tantos otros humanos, que nunca le encontraron una explicación a lo que les pasó.

Vos Alexiis no has pasado por eso, tiene que ver un poco con todas tus vidas anteriores, pero sin embargo es algo a lo que tienen que considerar y no temer porque se vuelve a producir. Ustedes están a punto de ascender a la quinta dimensión y pueden producirse experiencias energéticas muy fuertes.

Entonces los seres humanos que quieren acompañar a la Madre Tierra, tienen que estar preparados para todo ello. Tienen que estar preparados para cualquier experiencia que les pase. Siempre, siempre tienen que preguntarse, ¿qué es lo que tengo que aprender de esto? Tal como se dijo, nunca juzgarlo, nunca decir que tremendo esto malo, no, ¿qué aprendizaje me brinda esta experiencia.

Ojala hubiera más humanos que tomen en cuenta estas cosas, estos hechos y fundamentalmente que se animen a hablar de ello, porque hay muchos que tuvieron experiencias de un u otro tipo, pero por temor a que los consideren “locos”, no se animan a manifestarlo.

Yo sé, hablando de esto frente a la mayoría de las personas, creerían que ustedes están locos, no, no lo están, simplemente en cierto sentido están más avanzados.

Así que sigan aprendiendo, sigan avanzando y sigan sabiendo que todo lo que les pasa tiene su razón de ser, todo está previsto, son aprendizajes que tienen que hacer y esto es mi mensaje para toda la humanidad, no para ustedes solos, todos, en una forma u otra pasan por cosas extrañas, traten de ver qué es lo que les quiere enseñar.

Hoy los dejamos tranquilos en el sentido que no pedimos una canalización conjunta (no vino una sola sino dos), ya, queden tranquilos que ya los vamos a agarrar. Sí Sergio te ríes, es así. Cuando quieras... Alexiis lo percibió y ella ya sabe cuando tiene ese sentimiento más vale que una vez por demás trate de comunicarse que una vez de menos.

Por hoy los dejo hermanos y les mando todo mi amor. Yo Soy YESHUA.

* Sergio me estuvo armando un mueblecito que me compré.

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