Alexiis, 12 de octubre, 2009
Buen día amados Maestros, son las diez menos veinte y suena el primer campanilleo. Muy bien, ya que no hay domingos ni feriados, estoy acá en la computadora, encantada de recibirlos, quedo esperando....
Estoy tratando de elevar mi vibración pero no percibo nada todavía.... Sin embargo siento una energía fuerte y extraña....
Sí Alexiis ya vas a decir que siempre venimos aprovechando justamente lo que estás trabajando o pensando, en este caso trabajando. Estás trabajando con un artículo, dicho sea de paso muy bueno, que tiene que ver con el ‘miedo’ y la que aquí te habla es la CONCIENCIA DEL NO-TEMOR.
Quiero recalcar la importancia que tiene que cada ser humano vaya eliminando la más mínima pizca de miedo o temor que tenga.
Siempre tomándote como ejemplo, se te acaba de presentar la imagen de una víbora, de esas bien grandes, no las chiquitas a las que realmente no tienes que temer. Sí, sé que le tienes miedo a esas víboras grandes, algunas enormes, a raíz de lo que has pasado en tu infancia, pero sin embargo hoy, con tu capacidad, tienes que superar ese miedo.
Preguntarás ¿cómo?, es necesario que analices que esa víbora que quiso atacar a tu madre, realmente se estaba defendiendo porque es ella la que se sintió atacada y ella tenía 16 crías en su interior, así que es lógico que como madre proceda a la defensa de su propia vida y de sus crías, frente al que creyó su enemigo.
Lo que yo quiero decir con esto es que aún en situaciones así el miedo tiene dos caras, en este caso la víbora que se estaba defendiendo contra lo que creyó que era el ataque de tu madre, y tu madre que se sintió atacada por la víbora. ¿Ves como ambas partes, desde su punto de vista, tenían razón?, ninguna de las dos estaba obrando por maldad, tu madre queriendo cortar maleza y la víbora defendiendo su vida.
El miedo en realidad es el temor de que algo, generalmente negativo, se va a producir, pero ese algo también puede ser bueno, entonces el miedo se convierte en esperanza, o sea es positivo, toda esta apreciación solo vale si estás debidamente equilibrada y centrada en tu interior.
El temor, sin ponerle ahora la palabra miedo, que en sí es lo mismo, es una cosa que está muy inculcada en el ser humano y como ejemplo voy a usar algo de lo que hace muchísimo tiempo ya estás consciente, o sea el famoso cuento del “Cuco”.
Hay padres que a sus chicos para hacerles obedecer por ejemplo al acostarlos, y si los chicos son rebeldes y no lo quieren hacer, les amenazan con el Cuco o el Hombre de la Bolsa, el Hombre Malo, es todo lo mismo. Es decir, le infunden un miedo al niño, que le puede producir severos problemas psicológicos, hasta hubo casos de muerte por el susto, pero una vez que son adultos analizando esto, se van a dar cuenta que no existe un Hombre de la Bolsa, que no existe un Cuco, ni nada por el estilo, así que le han inculcado un temor que no tiene fundamentos reales, es decir el temor a que algo suceda, pero no frente a lo que realmente pasa.
Esto es lo que toda la humanidad tiene que solucionar todavía, tiene que evaluar el temor frente a la realidad, ya que si se ve enfrentada a algo que le produce miedo, tiene que analizar y superar y verle el lado bueno. Es muy difícil en una situación de miedo verle el lado bueno, pero si se procede con suficiente claridad mental verán que el objeto o la situación a la que le tienen miedo, tiene también su lado que demuestra que no es solamente negativo.
Por eso, esto no es solamente una enseñanza para que borren algo de su vida, a eso no voy, yo voy a que como Conciencia ustedes analicen toda cosa a la que le temen. Traten de encontrar el porqué y entonces lo pueden solucionar.
Fíjense en la imagen del pollito que sale del huevo, a él ni se le ocurre tenerle miedo al encierro, sabe que en su momento dado tiene que empezar a picotear lo que hasta ahí fue su casa, para salir de ella y poder seguir su vida en libertad. Eso es lo que el ser humano tiene que visualizar, la libertad, la falta de temor, la alegría y el amor. Sé que te vino a la mente el asunto de la claustrofobia, pero justamente aquí tienes un excelente ejemplo de como el pollito no se dejó dominar por el miedo al encierro sino instintivamente supo lo que hacer.
Los humanos tienen que dejarse guiar más por su corazón, y verán que muchos de los miedos de los humanos como por ejemplo también el miedo a meter la cabeza debajo del agua, el miedo a las alturas y sigue y sigue la lista, que en gran parte proviene de experiencias de vidas pasadas. Sin embargo, una vez que se ponen a analizar de dónde viene ese temor, cuál es su origen, verán que pasaron por esa experiencia, pero eso fue en el pasado, nada tiene que ver con el AHORA, así que no hay que tener temor en esta vida.
Casi, casi, yo diría para no repetir tanto la palabra miedo, yo soy la CONCIENCIA DEL TEMOR. Ahora me retiro, soy la CONCIENCIA DEL TEMOR que quiere que ustedes dejen de tener temor, por eso quiero convertirme en la CONCIENCIA DEL NO TEMOR, en la CONCIENCIA DEL NO MIEDO, esa es la meta.
Los dejos amados seres humanos y les agradezco la oportunidad de haberme podido manifestar y de poder convertirme en la CONCIENCIA DEL NO TEMOR.
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