Alexiis, 7 de junio, 2010
Buenas noches mis queridas hijas*, Alexiis se tuvo que aguantar porque yo no quería interrumpir.
Soy la MADRE MARÍA. Vengo a saludarlas, vengo a brindarles mi amor y mi luz y a través de ustedes, a toda la humanidad.
Qué lindo verlos así reunidos, trabajando en pro de la Luz, ojala habría muchos más que lo hagan, que tomen conciencia que lo fundamental de la vida es el amor, el amor hacia si mismos, el amor que se brindan los unos a los otros, el amor que brindan a la naturaleza, a la Madre Tierra.
Ustedes están recibiendo constantemente mensajes ahora, pidiendo que le manden amor a la Madre Tierra, que está pasando por lo que se llama el gran parto, que está sufriendo, tal como sufrieron tantas mujeres que hemos estado y que están en la tierra, que lo han pasado, lo han vivido.
Sí, pero ella gustosa tomó esto a su cargo, gustosa lo aceptó para poder llegar finalmente a la próxima dimensión con la mayor cantidad de humanos posible. Pero para que esa cantidad aumente de día en día, es necesario que tomen conciencia, es necesario que se abran al amor, que se abran a la luz.
Aún si son de la oscuridad, tomen conciencia que el camino que lleva a la meta, no es el camino de la oscuridad. Queridos hijos, ustedes también son hijos míos, pero el camino de la oscuridad no los lleva a mi presencia, los lleva únicamente el camino del amor y el camino de la luz.
Es por eso que venimos tantas y tantas veces, hablándoles en una forma u en otra y también gratificándolos, brindándoles el amor que siento y el amor que sentimos, todos los que estamos trabajando en pro del próximo paso a la otra dimensión.
Llegará el momento en el que ustedes nos perciban, que nos vean de nuevo. Hay muchos de nosotros que ya estamos pisando a la Madre Tierra, pero ustedes aún, todavía, no nos ven. A lo mejor hay quienes nos perciben, hay señales, presten atención a las señales, presten atención a todo lo cambiante de la existencia, pero fundamentalmente presten atención a la luz y al amor.
Este es mi breve saludo de esta noche, no pude dejar pasar la oportunidad de brindárselo. Sigan adelante hijas, sigan adelante. Les mando toda mi luz y todo mi amor, Yo Soy la MADRE MARÍA.
*Yo estaba con una alumna dando clase de ángeles.
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