NOTA: Como ya es costumbre que comparto todo con ustedes de mi vida, también lo hago con este mensaje.
Amados Maestros buenas tardes, son las cinco y cuarto. Ustedes saben perfectamente que es rara la vez que yo los invoco pidiendo información personal.
Amados Maestros buenas tardes, son las cinco y cuarto. Ustedes saben perfectamente que es rara la vez que yo los invoco pidiendo información personal.
Hace mucho tiempo atrás, en un momento dado, junto con unas compañeras acá estuvimos hablando de la posibilidad de que yo me vaya de Buenos Aires a otra parte y en ese momento, no me acuerdo quién de ustedes fue, que me dijo que acá en mi casa habían establecido como un faro de luz y que ni piense en irme de acá, que este es mi lugar dulce donde tengo que estar en el momento oportuno.
Siempre me he sentido bien con esto y lo he tomado al pie de la letra, pero ahora cuando Sonia y Gustavo, mi hija menor estuvo en Buenos Aires para pasar conmigo Navidad, ha surgido que mis hijas quisieran que me vaya a vivir más cerca de ellas para no estar sola acá.
Bueno, vivir en donde vive Bárbara, mi hija mayor no va al caso, porque es mucha altura, el clima no me beneficiaría con la salud y todo eso. Ahora donde vive mi hija menor, Sonia, sí. Es un lugar donde en el año 1976 con mi esposo habíamos comprado un terreno porque nos queríamos mudar para allá. Cuando en ese momento volvimos a Buenos Aires, ambas hijas pusieron el grito en el cielo no queriendo irse de Buenos Aires, para nada, y al final nos cansamos y lo volvimos a vender.
Yo sé que cuando llegue el momento en el que ya no me pueda manejar más sola, siempre he dicho que iré a un geriátrico y en ese caso iría a un geriátrico en Bariloche. Pero ahora ha surgido de parte de ellas la propuesta de que no espere a tener que ir a un geriátrico, sino que me mude a Bariloche, para estar más cerca y seguir allá mi trabajo por Internet, lo que puedo hacer sin ningún problema y también, cuando me lo sugirieron aquí en su momento respondí que no puedo porque tengo mis alumnos, mis pacientes, en fin, el contacto humano.
Ahora sinceramente, hablando con la verdad, a mis alumnos, o por lo menos a parte de ellos, no les interesa – en general estoy viendo que la gente está tan metida en su vida de la 3-D que la parte espiritual queda de lado cuando les viene bien – lamentablemente he tenido que ver que son muy pocos los que tienen una compromiso real frente a lo que tendría que ser nuestra labor como Trabajadores de la Luz. He tenido que aprender a la fuerza, que eso prevalece y que lo que yo personalmente siento, el afán de traer luz a este tan querido planeta, no es la norma.
Toda esta toma de conciencia real de mi situación surgió que me plantaron de nuevo, no avisando que no venían, en fin horas que estoy a disposición de otros no pudiendo hacer lo que a lo mejor quisiera. Por supuesto lo que quiero hacer es brindar la ayuda y el aprendizaje que tengo, pero evidentemente esto es algo secundario, y no creo que esto sea peor si me mudo.
Hoy por primera vez, dándole vuelta a este asunto en la cabeza, me he animado a preguntar al péndulo con respecto a la posibilidad si me convenía mudarme o no. Me contestó que ‘sí’.
Ojala que yo pueda recibir algún comentario de ustedes, alguna ayuda, alguna sugerencia, porque mi vida está dedicada al trabajo de luz. Ahora, ¿tiene que ser en Buenos Aires o puede ser en Bariloche? Esa es la gran pregunta. Recién me acuerdo que muchos trabajadores de la luz en la actualidad se están mudando de lugar, cosa que sé por todos los escritos, pero en ningún momento pensé que me podría tocar a mí.
Ojala ustedes me pudiesen dar alguna sugerencia, cualquiera de ustedes, me quedo esperando. . . .
Sí, Alexiis, ya sabes, soy YESHUA. Evidentemente tengo que venir yo o podría ser a lo mejor Tobías, pero él está ocupado con Sam, así que vengo yo.
La situación general tuya, desde aquel momento ha cambiado, porque evidentemente los años pasan, todavía eres humana y lamentablemente has recibido muchos ataques energéticos que te han debilitado y todo ello me hace entender y apreciar el amor y la preocupación de tus hijas.
Yo estoy seguro que si esto lo encaras, con tranquilidad, no apurándolo, allá también vas a encontrar otra vez gente interesada en formar grupos, por ahí pacientes o alumnos. No vas a estar sola, además acuérdate NUNCA ESTÁS SOLA, ya una vez te dijimos que puedes estar en la punta de la montaña más alta y más alejada del mundo y vas a seguir siendo Alexiis.
Así que si con tu cuerpo físico te mudas a Bariloche, vas a seguir siendo la Maestra Alexiis, eso no te quepa ninguna duda y nosotros vamos a seguir estando en contacto contigo, vamos a seguir apoyándote y trabajando contigo y esperando tu ayuda, porque tal como se están desarrollando las cosas, quizás allá puedas desarrollarte en una forma más armónica de lo que te permite este ambiente en el que estás viviendo.
Quizás allá en un lugar más unido a la naturaleza, en un lugar que no está tan contaminado, está contaminado, energéticamente por supuesto ya que lamentablemente lo está todo el planeta, pero allá quizás puedas encontrar almas más afines, almas que podrían estar abiertas a todo lo que vos puedes brindar, y eso es mucho.
Así que encáralo, encáralo a conciencia, hazlo despacio, pero de parte nuestra no vas a tener ningún problema, al contrario, si sabemos que te decides a ello, ya vamos a tirar – como se diría – unas ondas aquí y unas ondas allá, para que se vuelva a establecer el contacto humano que te falta.
Querida amiga, hermana, compañera de tantos eventos, todo esto a mi me parece, que te conozco desde hace mucho, que te da un nuevo impulso de vida, que te da una nueva meta adicional, un nuevo desafío y creo que lo necesitas en este momento, porque las cosas acá están demasiado turbias, necesitas el aire fresco.
Así que yo, YESHUA, te bendigo como siempre y hoy si acudí a tu llamado. Te envuelvo en todo mi amor, como siempre, pero igual antes nos hablamos. Que disfrutes de esa idea, de ese nuevo ímpetu, de esa nueva energía que está entrando en tu ser. Hace falta querida, hace falta.
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